Cada año, al aproximarse el cuarto Domingo de Adviento, S.B. el Cardenal Pierbattista Pizzaballa, Patriarca Latino de Jerusalén, acompañado de una delegación, solía comenzar los preparativos para ir del Patriarcado Latino a Gaza, para pasar tiempo de calidad con la parroquia de Gaza, visitar varias instituciones cristianas, reunirse con la gente de Gaza, y lo más importante, celebrar la Misa de Navidad para la comunidad cristiana allí, ya que el 24 de diciembre no la pueden celebrar con sus hermanos y hermanas en Belén, lugar de nacimiento de Jesucristo, Príncipe de la Paz.
La prolongada y amarga guerra ha interrumpido esta tradicional visita pastoral para esta Navidad de 2023. Y todos los cristianos de Tierra Santa se han abstenido de realizar cualquier celebración, como signo de solidaridad y compasión con el pueblo de Gaza. Más bien, las celebraciones navideñas de este año se limitaran a tiempos de oración, abstinencia e intercesión con la esperanza de que la justicia y la paz lleguen con la llegada de la Navidad.
La comunidad cristiana en Gaza, que es significativamente pequeña pero tiene una gran vocación, vive unida como una gran familia, mostrando fuertes relaciones fraternales entre sí y con la comunidad que los rodea, afrontando todos sus desafíos y dolores con un espíritu de fe, esperanza y firmeza. Guiada por el P. Gabriel Romanelli durante los últimos 5 años y a través de la asistencia proporcionada por el Patriarcado Latino, y todas las instalaciones e instituciones cristianas que se encuentran en Gaza, que brindan apoyo y atención a todos sin discriminación, la comunidad cristiana permanece allí. El Cardenal Pierbattista ha compartido con nosotros, al hacer un seguimiento del estado de nuestros feligreses en Gaza, que esta guerra ha hecho que su fe se fortalezca en lugar de debilitarse, que hayan permanecido en oración y que hayan puesto su confianza en la protección de Dios y se hayan negado a escapar de su patria. Por lo tanto, podemos atribuirles: "La sal de la tierra y la luz del mundo" (Mt 5,13).
Por lo general, S.B. hace dos visitas pastorales a Gaza en un año, para apacentar a su rebaño, como dijo en su última visita en 2022... "Yo soy vuestro pastor, y vosotros sois mi rebaño". Durante su estancia, dedica su tiempo visitando hogares de muchos feligreses para conocer a sus familias, escuchar sus necesidades, orar juntos y bendecir sus casas. En su última visita de Navidad, dedicó dos tardes y una mañana a visitar a las familias cristianas. Durante estas visitas pastorales se han creado muchos recuerdos, ya que ha estado visitando la Franja de Gaza desde 2019, y en años anteriores por parte de antiguos patriarcas. El Cardenal Pierbattista ha administrado el Sacramento de la Primera Comunión, la Confirmación y el Bautismo a un gran número de feligreses. Esperan su visita para realizar estas celebraciones. La Navidad pasada, S.B. el Cardenal Pierbattista dio el sacramento de la confirmación a 10 niños y niñas de la parroquia y bautizó a un bebé. También pudo ver y disfrutar de la obra de teatro navideña preparada por los niños de la parroquia. Siempre hay un tiempo especial dedicado a los jóvenes y a los scouts, pero especialmente durante su visita en 2021, el Cardenal Pizzaballa inauguró un campo de fútbol y baloncesto, se reunió con los scouts de la parroquia y organizó una jornada de actividades en el patio de la parroquia para los jóvenes. Una excursión a las dos escuelas del Patriarcado, así como a la escuela de las Hermanas del Rosario, es siempre una visita obligada durante su estancia. Sin olvidar las visitas a los dos centros de las Hermanas Misioneras de la Caridad, que atienden a niños, adolescentes y ancianos con discapacidades graves. En 2022, el Patriarcado Latino ayudó a ampliar el centro y proporcionó un ascensor para ayudar a facilitar el movimiento. También revisó diferentes proyectos financiados por muchos institutos cristianos en Gaza para conocer a los beneficiarios y conocer cómo los proyectos están teniendo un impacto en sus vidas.
Desde las adoraciones eucarísticas, misas, visitas de campo y horas dedicadas al diálogo y comunión en comunidad... La visita del Patriarcado Latino a Gaza durante la Navidad tiene una gran importancia. Les asegura que, efectivamente, no están solos; es algo que la parroquia espera y prepara durante todo el año; y lo más importante, los conecta con el Cuerpo de Cristo fuera de Gaza.
El dolor y el sufrimiento son inevitables en esta vida, pero la esperanza permanece... porque nuestro Dios es el Dios de la esperanza (Rm 15,13), es el Dios de lo imposible (Mt 19,26), así que unámonos en la oración y en la fe, y acojamos la Natividad de Cristo con espíritu de humildad, recordando que Él es Emmanuel, Dios con nosotros, y nos llama a ser la luz del mundo como "la luz resplandece en las tinieblas, sin que las tinieblas la hayan vencido" (Jn 1,5).
