El domingo 8 de septiembre de 2024, fiesta de la Natividad de la Santísima Virgen María, Mons. Rafiq Nahra, Vicario Patriarcal de Galilea, presidió una Misa de Investidura en la Basílica de Nuestra Señora de la Anunciación en Nazaret. La misa marcó la transición de tres postulantes - Elise Helou del Líbano, Dalin Maqbaa de Nazaret, y Sara Shehatit de Jordania - a la fase del noviciado y su primera puesta del hábito de la Orden del Santo Rosario.
Concelebraron la Misa el P. Ibrahim Sabbagh, párroco de la Iglesia de la Anunciación junto con numerosos sacerdotes. Asistieron a la ceremonia por la Hermana Sophie Hattar, Superiora General de las Hermanas del Rosario, y varias Hermanas que trabajan en toda la diócesis, las familias de las postulantes y los fieles.
La ceremonia comenzó con la declaración de las postulantes de su compromiso de vestir el hábito de la Orden del Santo Rosario y dedicarse a un compromiso más profundo con el carisma de la comunidad, la espiritualidad y los votos de pobreza, castidad y obediencia. Monseñor Nahra las bendijo con agua bendita, diciendo: «Que Dios os quite el viejo yo y os revista con la nueva persona en Cristo». A continuación, las postulantes vistieron el hábito y recibieron sus nuevos nombres: Hermana Elise, Hermana Dalene y Hermana Sarah.
En su homilía, Mons. Nahra subrayó el significado de la Misa de Investidura, tanto para las religiosas como para los fieles, comparándola con el Acto del Santo Bautismo. Destacó «Las Hermanas son un recuerdo vivo y un signo para nosotros los creyentes a través de su vida consagrada. También nosotros nos revestimos de Cristo por el bautismo y estamos llamados a abrazar de distintas maneras la pobreza, la obediencia y la castidad. Esta celebración nos recuerda nuestra verdadera vocación cristiana de vivir según el ejemplo de Cristo en todos los aspectos de nuestra vida». Concluyó exhortando a los fieles a discernir la llamada de Dios a través de la oración, el silencio y la comunión con la Iglesia.
Al final de la Misa, la Superiora General dio las gracias y ofreció oraciones por las nuevas hermanas, pidiendo la intercesión de la Sagrada Familia para que las acompañe hacia sus votos perpetuos definitivos.