Del 1 al 5 de julio de 2024, la Asamblea de los Ordinarios Católicos de Tierra Santa celebró su retiro anual en el Seminario del Seminario Redemptoris Mater en Galilea, atrayendo a una gran asistencia de obispos y sacerdotes.
El retiro de este año fue dirigido por el P. Amjad Sabbara, sacerdote franciscano de la parroquia de Jerusalén, quien enfatizó cuatro principios fundamentales para cultivar un sacerdocio satisfactorio: en primer lugar, el estudio y la comprensión constantes de las Sagradas Escrituras; en segundo lugar, el papel fundamental de guía espiritual en la vida sacerdotal; en tercer lugar, la importancia de fomentar relaciones sanas con los demás; y, por último, en cuarto lugar, el poder transformador de la meditación diaria, crucial para mantener un compromiso firme con el auténtico ministerio sacerdotal.
El programa del retiro incluyó diversos encuentros y oraciones siguiendo diversos ritos orientales, cubriendo temas como los deberes pastorales, sermones y el próximo Año Jubilar de 2025.
El último día del retiro, el viernes 5 de julio, se llevó a cabo una sesión con Su Beatitud el Cardenal Pierbattista Pizzaballa, Patriarca Latino de Jerusalén, para elaborar estrategias para el próximo Año Jubilar en Tierra Santa.
Se decidió que el 29 de diciembre de 2024 marcaría el día de apertura del Jubileo en Tierra Santa. Reconociendo varios lugares sagrados, como la Iglesia del Santo Sepulcro en Jerusalén, la Iglesia de la Natividad en Belén y la Iglesia de la Anunciación en Nazaret, como lugares para que los fieles obtengan la Indulgencia Plenaria, un signo especial de la misericordia ilimitada de Dios que concede la remisión de todas las penas temporales asociadas con el pecado, si se cumplen las condiciones especificadas. Próximamente se darán a conocer más detalles sobre las fechas y lugares de las indulgencias en toda Tierra Santa.
El Cardenal Pizzaballa expresó su gratitud en su discurso a todos los involucrados en la organización y participación en este retiro anual, ahora una querida tradición de la Iglesia Católica en Tierra Santa. Esta reunión no solo enriquece la comprensión de los diversos ritos católicos, sino que también fortalece las relaciones sacerdotales entre el clero.